Sé de un vino bueno
que alegra el corazón
y que alcanza a la vida.
Sé de un vino bueno
Sé de un vino bueno
que marida con la novedad,
la frescura y el anuncio.
Un vino que colorea
lo oscuro y lo marchito,
que saborea la vida en fragmentos
para ofrecer biografías de esperanza.
Un vino bueno,
Un vino bueno,
el que fecunda el agua corriente de nuestros minutos,
Un vino bueno,
el que devuelve la esperanza al cansado y al desesperado.
Un vino bendecido que sabe a bodas,
a compromiso y a alianza, siempre nueva y renovada.
Quien lo prueba
Quien lo prueba
sabe que su nombre
es elegido, eterno y único.
Sabe que su tierra
ya no más estará seca ni olvidada.
Que cada piedra de tropiezo
es un canto de libertad y de alegría
en el lagar de nuestros intentos.
Quien lo prueba, lo sabe.
Y quien lo entrega
es el Hombre de los signos,
el Hombre que porta la alegría,
el Hombre con el que da comienzo
la fiesta de bodas.
El Hombre que bendiciendo entrega
que entregando bendice.
es todo un Dios que se derrama como vino nuevo
para que tú y yo hagamos como Él nos diga.
Quien lo prueba, lo sabe.
Quien lo entrega… te espera.
Para que tú y yo cantemos que la Vida
es como vino nuevo que, a su tiempo,
sabe a entrega compartida.